La calidad de los servicios de una empresa no sólo depende de las interacciones con los clientes finales, sino son un reflejo del orden, control y agilidad de las áreas internas y externas.
Sin embargo, tanto los departamentos con contacto directo con clientes externos (ventas, cobranza, etc.), como con clientes internos (finanzas, tecnología, recursos humanos) no cuentan con un modelo que les permite definir procesos de operación y optimización. La consecuencia es muy visible, pues las áreas se ven saturadas, con desorden y sin seguimiento a los requerimientos de los clientes.
Este taller tiene como objetivo apoyar áreas que provean servicio a clientes (internos y externos) a generar una base sólida que propicie una operación previsible. Se estructura la definición, entrega y monitoreo de servicios que permitan incrementar la productividad y controlar y el uso de recursos requeridos.